Friday, March 20, 2015

La gracia de Dios siempre asiste al que lucha ( San Juan de Shangai )


La gracia de Dios siempre asiste al que lucha, pero esto no quiere decir que el luchador es siempre un vencedor, a veces las criaturas no tocaron a los correctos y de ninguna manera los tocan siempre. Nos es la victoria ni la postura de vencedor, lo que importa sino la labor del esfuerzo y veneración a Dios. Grande es el Apóstol Pablo, cuando pide por el Señor muchas veces (‘tres veces’) diciendo que un mensajero de Satanás lo hiere con ataques difíciles y adversos a su espíritu. El Señor lo deja en esa condición: "Te basta mi gracia" (2 Cor. 12:7-9) — y se le provee suficiente gracia y dones. El Señor quiere para el apóstol el esfuerzo que limpia su alma.

Lo que es importante en el estado del alma es el esfuerzo hacia Dios, y no la estatura del vencedor. "Mi poder triunfa en la debilidad" (2 Cor. 12:9). Que el hombre pueda encontrarse en un estado de debilidad no quiere decir que ha sido abandonado por Dios. El Señor Jesucristo, de acuerdo con la visión mundana, estaba en problemas pero cuando el mundo pecaminoso lo consideró totalmente destruido, en realidad el salía victorioso de la muerte y del reino de los muertos. El Señor no nos prometió posiciones de ganadores como recompensa de virtudes, pero nos dijo: "En el mundo tendrán que sufrir, pero tengan valor, yo he conquistado el mundo" (Jn. 16:33). El poder de Dios es efectivo cuando una persona pide por su ayuda, reconociendo la debilidad y el pecado de su naturaleza. Por ello, la humildad y el esfuerzo hacia Dios son las virtudes fundamentales de los Cristianos.



San Juan de Shangai

La Señal de la Santa Cruz ( San Juan de Kronstadt )





El sacerdote al bendecir a los fieles con la señal de la Santa Cruz durante la Liturgia, representa la gracia, o la bendición de Dios; al hombre en Cristo, y por causa de Cristo. 


¡Benditos todos los que reciben esta bendición con fe! Cuán atentos deben ser los sacerdotes concediendo esta bendición sobre los fieles. "Y ellos invocarán Mi Nombre sobre los hijos de Israel, y Yo los bendeciré."

San Juan de Kronstadt